La relajación no solo es placentera sino que es un proceso vital reductor del desgaste y el daño a los cuales sometemos la mente y el cuerpo.
Las personas que están en tensión permanente y no saben tomarse un antídoto (tiempo de relax y calma) acaban rompiéndose, especialmente a partir de cumplida cierta edad y de haber mantenido, por tanto, la tensión y el estrés durante años. La adecuada relación cordial entre la cabeza y el corazón, entre la inteligencia y la afectividad, entre las razones de la mente y del corazón... nos dará más estabilidad y equilibrio a nuestra vida.
En lugar de poner la relajación en último lugar de nuestra lista de actividades diarias será muy importante "hacer siempre huecos en nuestro día a día" para relajarnos. Será la actividad más beneficiosa para nuestra salud y para todos los que nos rodean.
A nivel físico, algunos beneficios de la relajación son:
- Disminución de la presión arterial y del ritmo cardiaco.
- Disminución del ritmo respiratorio. Se regula la respiración, lo que aporta mayor nivel de oxígeno al cerebro y a las células. Estimula el riego sanguíneo.
- Disminución de la tensión muscular.
- Reducción de los niveles de secreción de adrenalina y noradrenalina por las glándulas suprarrenales.
- Aumento de la vasodilatación general, lo que trae consigo una mayor oxigenación periférica.
- Reducción en los niveles de colesterol y grasas en sangre.
- Aumento del nivel de producción de leucocitos, lo que refuerza el sistema inmunológico. Esto aumenta la capacidad de recuperación y prevención de enfermedades.
- Disminución en la cantidad de lactato sanguíneo (este es uno de los instigadores de la ansiedad).
- Desarrollo de un estado de descanso al nivel más profundo, (gran remedio para insomnio y parasomnias).
- Aumento de las frecuencias cerebrales Alfa (correspondientes a estados relajados).
A nivel psicológico, la relajación es una herramienta muy importante para conseguir tranquilidad y quietud, dotándonos de estrategias para enfrentarnos a diversas situaciones de la vida cotidiana.
La relajación va a ayudar a disminuir los pensamientos que nos producen ansiedad y nos llevará a un estado de calma y paz.
Nos permite dejar de lado las preocupaciones cotidianas, y la mente puede explorar y liberar los pensamientos.
Es un tiempo que podemos dedicar a nosotros mismos y a nuestros sentimientos.
La relajación favorece un funcionamiento cerebral (ondas alfa y theta) similar al sueño y aumenta la capacidad de concentración y creatividad. También se favorece la visualización e imaginación.
Otros beneficios psíquicos de la relajación son la reducción de la agresividad, una mayor seguridad en uno mismo y mejor control emocional. También es útil para el desarrollo mental de adolescentes estudiantes y nos ayuda a prepararnos para enfrentarnos a situaciones conflictivas.
Como hábito psicoprofiláctico podría estar indicada para la mayoría de la población en todas aquellas situaciones estresantes de la vida diaria como los exámenes, el estrés laboral, las relaciones conflictivas, el exceso de trabajo, sobrecargas, situaciones vitales de alto nivel de estrés...
Nuestro cuerpo nos avisará mediante los "síntomas" (dificultades del sueño, irritabilidad, cansancio excesivo, tristeza, fatiga, dolor... etc). Hagamos caso de nuestro "cuerpo sabio" y adoptemos hábitos más saludable que nos faciliten el acceso a la estabilidad, el equilibrio psico-emocional y al bienestar personal.
Tanto por y para nosotras/os mismas/os como para todos los seres humanos que nos rodean y comparten nuestra vida cotidiana.
"Queres Es Poder". Con un "acto de voluntad" verdadero encontraremos el tiempo para cuidar de nosotras/os verdaderamente.
